Esta panna cotta de café es un postre muy sabroso, facilísimo de hacer, además siempre sale bien. La panna cotta es un postre de origen italiano, concretamente de la región del Piamonte, elaborado con nata, azúcar y gelatina, principalmente. Tiene apariencia de flan pero textura de gelatina.
Si aún no habéis probado la panna cotta os animo a probarla y, sobre todo, a que la hagáis vosotros mismos ya que es muy fácil de preparar y es mucho más saludable que las que venden hechas en el mercado.
Ingredientes
- 500 ml. de nata líquida
- 200 ml. de leche entera
- 120 gr. de azúcar ( yo le he puesto azúcar integral de caña, panela)
- 10 gr. de café soluble
- Un sobre de gelatina en polvo (10 gr.)
- 60 ml. agua fría
Elaboración:
En primer lugar ponemos en un cuenco el agua fría y el sobre de gelatina, removemos bien y lo dejamos que espese.
En una olla ponemos a fuego medio la nata, la leche, el azúcar (o miel, si lo prefieres) y el café soluble. Con unas varillas no dejamos de mover para que se disuelva bien el azúcar y el café soluble.
Cuando empiece a hervir, apagamos el fuego y le echamos la gelatina.
Lo ponemos en un molde o en pequeñas flaneras si lo prefieres. También puede ponerse en vasitos o pequeños cuencos si no lo queremos desmoldar.
Una vez, se haya enfriado, ya lo podemos meter en la nevera. Lo dejaremos allí unas cinco horas o mejor toda la noche.
Desmoldamos y listo para disfrutar de esta verdadera delicia.